MAMÁ FELIZ VS MUJER REALIZADA
Mi primer día de mamá, fue una mezcla de inmensa felicidad con la más grande tristeza, de inmediato identifiqué que sufría una depresión post parto, por eso es importante prepararnos para cada etapa, para poder identificar lo que nos está sucediendo y superarlo. Durante mi embarazo nos organizamos en casa, para tener cerca mi consultorio y poder continuar con el ejercicio de mi profesión, y al mismo tiempo dedicarle tiempo a Martina. Esto no fue casualidad, planifiqué esto por mucho tiempo, porque me conozco y sabía que a diferencia de otras mamás que no desean salir de casa, yo moriría por hacerlo.
Sí ya eres mamá o deseas serlo, aquí te explico una serie de sencillos pasos, para emprender con éxito y disfrutar una maternidad libre de culpas:
1. Gana Consciencia sobre tu realidad.
Escribir es terapéutico, empieza con una lista en donde describas tus talentos, debilidades, con que cuentas para hacer realidad tu proyecto (desde lo material hasta lo espiritual), y con quien cuentas para recibir apoyo, ya sea emocional o para cuidar a tu bebé.
En mi caso, al mes y medio de ser mamá, retomé mis consultas 3 horas por día, me distraía, sentía que tenía un espacio para mí y que era productiva.
2. Recupérate.
Al conocer lo que tienes y lo que necesitas, debes recuperarte de tantos cambios y el reto de ser mamá en el día a día. Explora heridas del pasado, conecta con la niña que vive en ti, y de inmediato verás cómo imitamos muchos comportamientos de mamá y papá, sobre todo los que más rechazamos en nuestra infancia.
Parte de recuperarte es formar parte de una ´´tribu materna´´ que sea similar a ti, las mujeres unidas somos poderosas, te sentirás identificada y que no eres la única en el mundo que se siente agotada.
Despídete del sentimiento de culpa, haces lo mejor que puedes con lo mejor que tienes. Este proceso, de liberarnos de las culpas, estará con nosotras el resto de nuestras vidas, lo lindo es identificarlo y no auto castigarnos.
3. Planifica, arma tu estrategia.
Planifica horarios, lo más importante es que puedas llevar un balance entre el tiempo que inviertes con tu familia y tu vida profesional. Tienes que saber, que cuando menciono la palabra ´´familia´´, hablo que sólo tomes en cuenta como prioridad a tu núcleo, tu pareja e hijos, porque aunque suene cruel no podemos avanzar si también debemos prestarle atención a toda la familia, siempre hay tiempo para reunirse en fechas especiales y apoyar a nuestros padres, con límites y respeto de lo que ahora es ´´nuestro núcleo´´.
4. REINVÉNTATE.
Seguro ya te diste cuenta que las nuevas generaciones nacen aprendidas, quiere decir que tenemos que actualizarnos todos los días, mantener la mente flexible a lo nuevo, y ofrecer soluciones innovadoras para la vida de las personas, te hará ganar la capacidad de ser atractiva en el mercado, con grandes posibilidades de éxito.
Cada una de nosotras es un mundo único, vivimos experimentando emociones nuevas y cambiamos nuestros gustos y elecciones. Ahora que termino de contarte mi experiencia y llego al final de este artículo, entendí que si cambiamos el orden al leer el título, tenemos la respuesta para todo.
Una mujer realizada siempre será una mamá feliz.
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